Resumen
El debido proceso es un principio legal, jurídico y procesal, por el cual el Estado debe respetar los derechos que posee una persona y las garantías mínimas dadas por la ley tendientes a asegurar un resultado justo y equitativo dentro de un proceso y a permitir tener oportunidad de ser oído y a hacer valer nuestras pretensiones legítimas frente al juez, siendo que el debido proceso se ha interpretado frecuentemente como un límite a las leyes y a los procedimientos legales son los jueces quienes deben definir y garantizar los principios fundamentales de la imparcialidad, justicia y libertad.